y nada otorga,
salvo su propia ausencia.
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TIEMPO
Habrá tiempo, quizá, para más tiempo. Tiempo para enrollarnos detrás de las ventanas observando las paredes de enfrente. ...
Habrá tiempo, quizá, para más tiempo. Tiempo para enrollarnos detrás de las ventanas observando las paredes de enfrente. ...
Hay silencios que hablan más que las palabras calladas. Esto se ve bien en el buen cine: hay películas donde los actores hablan más con sus silencios que con el texto literal del guión.
ResponderEliminarMira, ¡soy el primer amigo del blog, qué ilusión!. Enseguida tendrás más, y a mí se me dejará de ver, pero me dará mucha alegría que te crezcan los lectores.
Un abrazo
¡Reitero lo dicho!
ResponderEliminarSe palpa el silencio y esa ausencia en cada verso.
Y soy la segunda, encantada.
Un abrazo
Gracias Juglar y bienvenida a estos brevísimos latidos míos que me encanta compartir contigo. Te devolveré la visita. Un abrazo
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